Ya estoy con mis arrebatos jajajaja. Os explico el reto de esta semana.
Hace tiempo que llevo dándole vueltas a una cuestión.
¿CÓMO VIVIAMOS ANTES DE TENER TELÉFONO MÓVIL?
Retrocedamos en el tiempo unos... ufff... bueno retrocedamos!
Una situación cualquiera. Sales del insti, pelo cardado, camisa con hombreras por dentro del pantalón sobaquero, flequillo "toldero", carpeta de los "Take That" que regalaban con la Superpop y veinte duros en el bolsillo para coger el autobús.
De camino a la parada del bus, vas charlando con la Carmen, la Toñi, la Maribi y la Mari y decidís quedar para ir a ver una película al cine. Sabes que te costará pedirle a tu madre los cien duros para la entrada pero valía la pena por ver a Brad Pitt en "Leyendas de Pasión" luciendo su pelazo al viento.
La cosa era mas o menos así:
"-Bueno tía, entonces ¿cómo quedamos?
-A ver, yo miro la cartelera en el periódico de mi padre y llamo a la Toñi a su casa, después de la siesta claro, y ella que haga cadena ¿vale?"
¡¡Hacíamos cadena!!! Nada de grupos de wasas ni pijadas. Yo llamaba a la primera y ella a otra y así hasta llegar a la última que cerraba el círculo llamándome a mí otra vez para decirme en qué había quedado la cosa.
Lo normal era que pasara como en el teléfono escacharrao y lo que yo dije en un principio, nada tuviera que ver con lo que me respondía la Mari...
Y aquí era cuando la cosa se hacía interesante.
Siempre había una que se presentaba a la hora correcta pero en el cine equivocado. Y ¿cómo lo solucionábamos?
"- Nena, ya verás como la Toñi sa quivocao de cine, tía. Mandale un guasas"
-Tía, que no existe eso todavía.
-Pos la llamamos a su casa a ver si su madre sabe algo. ¿Llevas cinco duros?
-Sí, toma. A esa cabina no, que se traga las perras. Vamos a la otra de ahí.
-¿Te sabes su teléfono?
-Espera que lo llevo apuntao en la agenda de la Vale. A ver,.. 26..58...51."
Y ahí es cuando entraba en juego la segunda profesión de nuestras madres: operadora telefónica.
Tú llamabas a casa y le decías a tu madre "¿han llamao mis amigas? es que no han llegao al cine. Si llaman diles que estoy en el cine Floridablanca" y al rato volvías a llamarla para que te contara lo que tus amigas le habían dicho.
Esas eran nuestras odiseas cada vez que quedábamos. Sin contar las veces que llamabas a alguna amiga para contarle algún cotilleo y tu madre se ponía a escuchar en el otro teléfono y se permitía el lujo de echarte broncas!!!
Pero eso es lo que le daba emoción a la vida.
Por eso, porque ahora somos incapaces de salir de casa sin móvil y palidecemos cuando suena el "bip" de la batería que se agota y no tenemos el cargador. O nos enfadamos cuando mandamos un wasap y vemos a la otra persona "en línea" y no nos contesta. Porque quedamos con los amigos, la familia y hay veces que ni nos miramos a la cara porque estamos pendientes de un grupo de wasap, o del facebook o del twiter...
Yo, lo reconozco, soy adicta al teléfono y he decidido que esta semana que estoy de vacaciones, me voy a rehabilitar!!! jajajaja
De momento, he quitado el wasap y desde ayer no he tenido la tentación de volverlo a instalar.
Espero acabar la semana y decir que he superado este pequeño reto personal.
Y, a continuación, os dejo alguna fotografía para que os hagáis una idea de lo que he contado en este post.
¡¡¡ Nos vemos!!!
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