COMO CONVERTIRTE EN CHIQUITO DE LA CALZADA... SEGUNDA PARTE.

¡¡¡ Buenas tardes fanses y fansas !!!

La aventura continúa... 

Sábado, 13:00 hora zulú... Nuestro punto de encuentro es en casa de la mía mamma. El grupo, integrado por diez personas humanas y una perra Yorkshire con superpoderes, pone rumbo hacia su reto personal. 

Está claro que ante la proeza que estábamos a punto de llevar a cabo, era necesario coger energía. ¿Sabéis esas revistas de deporte en las que te dicen qué alimentos son buenos y qué es lo que no conviene tomar antes de realizar un esfuerzo de aquellas características? Pues bien, nos lo pasamos por el forro. Morcón, chorizo, jamón, queso,.... Cerveza!!! Vamos, lo que viene siendo la base de la dieta de Cristiano Ronaldo y Rafa Nadal... Ahora, a ver quien tenía narices a meterse 15 kilómetros entre pecho y espalda!!!! 

Por supuesto, Dolce, nuestra mascota, fue la primera en marcar el ritmo ¡Y menudo ritmo! Estaba claro que aquello no iba a resultar nada fácil pero... si una perra más ligera que el aire, no más grande que un conejo y con una zancada minúscula podía hacerlo ¿cómo no iba a poder yo?

"Pensar que puedes ganar a un perro mini y aguantar 16 kilómetros de caminata en una pendiente ascendente continua porque llevas un palo de andar y con eso te crees Dios... ¡¡¡¡ ERRORRRRRRR !!!!

"Asumir que el deporte mola pero para verlo desde el sofá tomando una cerveza bien fría y algo de picar.... ¡¡¡ ACIERTOOOOO!!!"

Asín es. 

Empezó a pesar la mochila, luego los brazos, luego los pies, luego las pestañas... y allí seguía Dolce, vacilando con sus minipasos, permitiéndose frenar y acelerar su ritmo a su antojo mientras los demás moríamos a cámara lenta.... ¿Por qué Señor? ¿Por qué me has dado estos pies tan amorfos que no son capaces de dar un paso recto?

No recuerdo en qué kilómetro empezaron las alucinaciones pero comencé a ver a Shagy, el inseparable amigo de Scooby Doo y a Freddy Kruguer.... pero ya era demasiado tarde para dar la vuelta.

Sólo podía seguir adelante... y ahí, es donde comencé a andar a lo Chiquito de la Calzada... 

Un mano en la zona riñonal, la otra mano con los dedos índice y pulgar haciendo una "o" y pasos muy cortitos, acompañados de pequeños saltitos como si estuvieras metiendo el pie en el agua para comprobar la temperatura y te quemaras... ¡Ah! y de vez en cuando, un gritito.

¡Y ya podemos contar todos los chistes que queramos!

¡Siete caballos vienen de Bonanzaaaaa! ¡Jarrrr! ¡Ti dáh cuen! No te digo trigo por no llamarte Rodrigo....

Pero lo conseguí. Acabé mi primer tramo como una auténtica campeona... Eso sí, llegué la última pero llegué. Aunque no se si seguía siendo sábado cuando atravesé la puerta del camping....

Lo que sucedió esa noche en la cabaña y nuestra hazaña del día siguiente, será el tema de mi siguiente post que será el último de esta increíble aventura.

Gracias por seguirme tan fielmente juajuajuajuajuajua

Y, para que nos os imaginéis aquellos pasos, aquí os dejo un chistecico de ese pedaso de monstruo, fistro pecadorrrrrr!!!!

Ta prontoooooo!!!!