jueves, 24 de julio de 2014

¡¡¡MI LUCHA CONTRA LOS KILOS...ARRRRRRRRGGGGG!!!

¡Muy buenas noches!

Vamos a ver. Hoy, como cada jueves desde hace un par de meses, he ido a mi clase de ... de... bueno de lo que sea como se llame lo que hago (yo lo llamo ir al matadero juas juas). 
¿Que cómo ha ido? Pues como diría mi máma: "he salío inritá viva".
No es que la cosa haya ido mal. Lo que pasa es que los jueves es el día de "aymadremiaelpesomavistoyhaechaoacorrer" y no me he escapao ni haciendo la cobra.
Ahí estaba yo, con las fosas nasales mas abiertas que las de Bisbal cuando estornuda, para poder meter todo el oxígeno que me faltaba en mi agotadísimo cuerpazo, expulsando toxinas por cada poro de mi tersa y delicada piel, bebiendo cada gota de agua de mi cantimplower para volver a la vida... Cuando aquella báscula (también conocida como "la máquina que te hace llorar con solo tocarte"), se ha puesto en marcha... Os juro que los dos metros que me separaban de aquella infernal balanza, han sido los más largos de mi vida. De hecho, me ha parecido oír la banda sonora de "Carros de fuego" en aquel trayecto (tranquilos, mi pssssiquiatra dice que mientras las voces y ruiditos sean positivos, bien va).
Pero le he echao valor, coraje, arrojo, garbo, un par de huevos vamos, y me he subido. Los números se han vuelto locos, hasta llegar a una cifra: 77,7 KILOS!!!!
¿Qué cual ha sido mi cara? Pues esta...



De verdad que no daba crédito (cómo los bancos, vamos). Tantos escuats, crunchs, purpis, y guantás a to meter con los guantes de boxeo... ¿pa 200 míseros gramos perdidos?
¡Ah, no! a mí tonterías las justas...
Pero hete aquí, que mi superhipermega sensacional entrenador, para que no me venga abajo, ma disho: "lo que importa no es el peso, es el volumen"... Benditas palabras que me han dado un poquito de esperanza. 
Ha cogido aquella cinta métrica y má gritao: ¡Enséñame el ombligo!... Ningún hombre había sido tan directo conmigo... ¡Bueno sí, mi ginecólogo! Pero ese me dice que le enseñe tó lo negro, así sin anestesia ni nada...
El caso es que me ha medido y.... ¡Redoble de tambor! ¡He perdido 3,5 cms de cinturaaaaaa!!!
Yo, no lo veo claro, pero él se ha puesto to contento. Así que parece ser que todo va por buen camino. 
Y ¿sabéis una cosa? 


"NI RETIRADA NI RENDICIÓN"

2 comentarios:

  1. Enhorabuena guapa!! Tu si que vales!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola preciosa! Que sepas que aquella charla en Lavapiés, fue muy motivadora para mí. Tod@s formáis parte de esta metamorfosis!!! A ver si lo consigo jejejeje.

      Eliminar